Yo todavía no entiendo como es que la política se sigue tratando de defensas y competencias. Los 4 candidatos a la presidencia de Chile, durante el debate televisivo del pasado 9 de noviembre, no hicieron más que buscar el momento preciso para atacar a su contrincante, y de paso, sacar a relucir sus propios méritos. No quiero caer en favoritismos ni excedidas criticas hacia un candidato en específico; solo quiero recalcar el sabor amargo que me deja el escucharlos. A mi lo que me importan son las ideas y lo que pretende cada personaje hacer. Sé que mi visión es totalmente opuesta a la de todos, ya que básicamente apuesto no a modificar lo que ya existe en pro de mejorarlo, sino que cambiar todo el sistema, en busca de lo óptimo.
Creo que la política como la conocemos está anticuada, es por eso que ya muchos están desencantados y deciden no involucrarse. No es muy difícil darse cuenta que los partidos políticos hoy no son necesarios. La "derecha" y la "izquierda" cada vez tienen menos diferencias, sus militantes se intercambian de un lado para el otro fácilmente y es que claro, lo que hacen y cómo lo hacen no difieren mucho. Es cierto, y reconozco, que en épocas pasadas la diferencia era notoria y era necesario "abanderarse" en algún sector: o eras rojo o eras azul; y lo hacías no solo por ideales hacia un lado sino para mostrar oposición hacia el otro, hacerlo saber. Pero hoy, honestamente, no veo mucha claridad en cuales son de acá o de allá. Empresarios hay tanto en la derecha como en la izquierda, finalmente son los mismos los que manejan en el país, sin importar quien salga como presidente. El socialismo pasó de moda, lo ultra conservador también. Por eso, apuesto por una sociedad sin partidos políticos, y puedo ir aún más allá: apuesto por una sociedad sin política, sin presidentes, sin fronteras y sin dinero. Es así como podremos alcanzar la tan ansiada utopía, uniéndonos.
No estoy en contra de la diversidad ni las diferencias; al contrario. Pero siento que últimamente la política no es más que un juego, donde finalmente, hay alguien que "gana". Pero esto de lo que tanto hablan, el famoso "pueblo y la vocación de servicio", no debiese ser un juego donde se compita y hayan ganadores y perdedores. No. Es un sentimiento real y un trabajo que todos debemos llevar acabo. Todos tenemos esa llamada "vocación de servicio" porque finalmente todos queremos estar bien, ser felices y que nuestro alrededor también viva armónicamente.
Me da pena como los candidatos deben crear estrategias persuasivas y valerse de los métodos publicitarios para "mejorar el país y la vida de todos nosotros". No debiese ser necesario eso, el mensaje debe llegar por sí solo y no depender del color o de la cantidad de afiches que pusiste en la calle. Cada uno de estos rostros que se muestran luego en la franja electoral, terminan siendo productos, en donde el más atractivo y mejor elaborado, es el que vende; el que por lo tanto, es el nuevo gobernador del país. Me resulta patético tener que ver a Frei burlándose de sus rasgos físicos y calificándose de fome, así como también calificando a sus contendores de faranduleros y poco serios. Me choca ver a un Sebastián Piñera lleno de frases pre-hechas seudo poéticas-intelectuales, repitiendo su mismo discurso en todo lo que debía responder. O Marco Enriquez, que en su afán de perfil "adulto joven alternativo" intenta ser progresista y rompedor, que busca la provocación pero que de todas formas no quiere quedar mal con nadie. El tráfico de preguntas además que cada periodista hacía y los propios juicios de valor y tendencias políticas que se hacían visibles tornaban al debate un tanto absurdo y superficial. Canal 13 sabe demostrar a cada instante que es canal 13, religioso y "éticamente económico". Esto mismo puede notarse en el trato con Arrate, el 4º candidato al que quiero hacer mención por el debate. Este señor socialista fue poco intervenido y la verdad, yo valoro sus pocas palabras. La redundancia de populismo y cháchara de los demás me tenían un poco cansado. Arrate tuvo sus ideas claras y habló lo preciso; sin embargo, aparte de tener un par de contradicciones, los periodistas supieron hacerle notar al espectador que él era el candidato izquierdista en cuestión, el "diferente". A esto, yo digo:basta de comparaciones y críticas hacia los gobiernos exteriores!! Por el mismo asunto de los partidos, se hace casi obligatorio y de rutina preguntarle al candidato de izquierda por Fidel Castro o Hugo Chávez. Basta de estereotipar gentes y generalizar hechos; hablemos de cosas diferentes, no de si efectivamente Piñera pone el logo de su estrella en todos sus anuncios, o no.
Por eso, más que intentar solucionar esta "crisis política" como podríamos llamarla, es decidirse a cambiar esto, radicalmente. A no ser dependientes de que alguien nos gobierne. Desechemos la política, demos un paso evolutivo y miremos esta lucha competitiva como una etapa histórica superada: decidiéndonos sencillamente, a gobernarnos nosotros mismos. En otras palabras, que cada uno sea capaz de gobernarse a si mismo siguiendo su corazón, para así, como humanidad en esta Tierra, vivamos en complemento y Amor.
Escrito por Rodolfo...
pronto más detalles de su candidatura como presidente: por lo pronto, pueden votar en la encuesta que CPE puso en el blog, al lado derecho de tu pantalla.
gracias!
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