¿Qué es el amor?
El amor es la respuesta a todo.
El amor no es una abstracción,
sino una energía de verdad.
Empieza a entrar en contacto con Dios en tu interior.
Siente el amor.
Expresa el amor.
El amor disuelve el miedo.
Cuando se siente amor no puede temerse nada.
Como todo es energía,
y el amor abarca todas las energías,
todo es Amor.
Dios no exige nuestro respeto.
Insistimos en personificar a Dios
a pesar de que sabemos
que está mucho más allá de lo que
somos capaces de conceptualizar.
Dios no tiene sexo.
Ésa es otra personificación.
Dios no tiene religión.
En el fondo de nuestro corazón todos lo sabemos.
Dios no tiene raza.
Dios lo es todo,
una energía de amor
que posee una sabiduría
y un poder incomprensibles.
Todos estamos comprendidos en Dios,
porque él esta en todos y cada uno de nosotros,
es la sustancia de nuestro ser.
Es muy humano desear signos
y mensajes inmediatos.
Sin embargo, para escuchar
hay que saber hacerlo,
y para saber
hay que dedicar tiempo a aprender.
Si lo practicas el silencio
el viaje interior,
si te das tiempo para escuchar
y crear el espacio para escuchar,
serás capaz de oír.
Serás capaz de ver los signos
y recibir los mensajes que esperas.
Al mismo tiempo,
desarrollarás el arte de la paciencia.
La paciencia y la oportunidad…
Todo llega cuando tiene que llegar.
Una vida llega cuando uno puede vivirse sin prisas,
no puede ajustarse a un calendario.
La vida no tiene final, nunca morimos.
Nunca hemos nacido de verdad.
Lo que sucede
es que pasamos por distinatas fases.
No existe un final.
Los seres humanos tenemos
muchas dimensiones
pero el tiempo no es como lo vemos,
sino que se compone de lecciones
que se van aprendiendo.
Sólo el Amor es real.
El amor es una energía de increíble poder y fuerza.
Todos estamos hechos de esa energía.
El amor es algo absoluto.
El amor no termina nunca, no se detiene nunca.
La forma más pura es el amor incondicional, el que no espera nada a cambio.
los murmullos de nuestro corazón.
Vivamos la libertad de amar sin reprimirnos, sin reservas, sin condiciones.
No tengamos miedo.
Somos inmortales, espíritus eternos, y somos siempre amados.
De hecho, somos Amor